lunes, mayo 30, 2016

ELEGÍA, a Betty Alba

Compartiendo con ustedes, mi vida

 https://scontent-gru2-1.xx.fbcdn.net/t31.0-8/12885812_10209441244813004_4731019712079955085_o.jpg
 Jardín de la Casa de la Poesía ( Casa de Betty Alba)




Si observas  al trasluz verás pasar el mundo
 rodando en una lágrima
Olga Orozco



Déjame tu voz hoy
cielo impenetrable
manos de azucena
poesía mujer.
Una ciudad tardía
grita tu ausencia
en abrazos de pascuas
                                   Maestra
no abras la puerta
 al infinito
                        todavía es tarde
y el tiempo regresa
a tu raíz.
Dónde están
las lluvias del jazmín confesor
                                         el jazmín mundo
y las misivas urgentes de tu Manuel.
Indigentes de tu palabra
Con racimos de doradas lágrimas
                                                   de pie hacia el océano
 le avisamos en solitario  tus novedades.
No hay noche más muerte
en un día resucitado.

Del jardín emblema
                               nuestra casa
se ha retirado en silencio
su guardiana. 
Ha quedado en ensueño
los custodios del  canto.
Fuiste a entregarle
en persona
                            al Amor
el Amor.

Sandra López Paz (Del libro, Mis propios deberes)

RECUERDOS...

Compartiendo con ustedes, mi vida










































La SAN JUAN

Compartiendo con ustedes, mi vida
 https://scontent-gru2-1.xx.fbcdn.net/v/t1.0-9/12806203_10209083815077484_2521489448953147511_n.jpg?oh=237298622f1aa22944d58c5e8d7972ea&oe=57C13B3E

                                    las minúsculas cosas de los otros
                                      los ruidos de los otros
                                       tu propio ruido
                                                                       Betty Alba


Estuve visitándote madre
allí tu domingo tomaba
entre las alegrías
 mates a la calle
dulces de poleo solitario.
Casi nocturna
la luz de tus manos
posaba a su lado.
Caminamos a nado
al verde de sus ojos
aroma manzana y arena
custodia del salitre
de  margaritas naranjas  los azulejos.
Apoyada en los marcos
de cualquier ángulo puedo presentirte
en la cama liviana de tus pesares
en la silla donde están
los signos de la espera
                como si estuvieras viéndome
                yendo  a mi nacer tu primeriza
señalas la escalera cuando digo
                                    estás madre
señalas la pared cuando me caigo
                                     estás madre
señalas el ropero cuando cierro
                                    estás madre
me señala el alma tu brazo
                                    estoy hija
me buscas atrás donde me hinco
la cortina despliega el silencio
habla el viento
habla dice en mariposa
estoy.

Sandra López Paz . Del libro “Mis propios deberes”

Alianzas

Buscando poemas luminosos Crea un pacto con la tierra,        ella va adelante. Toma su rubor de hortensias       y limpia la frente. Dale u...